A propósito del compromiso social y de los recursos que nos corresponden a todos, el día viernes 22 de noviembre del 2024 tuve la oportunidad de visitar el sector de Playa Oeste, un populoso barrio localizado tal como lo indica su nombre al Oeste de nuestra ciudad y lo que allí vi, sentí y viví para mi fue desgarrador.
En diciembre del año 2021 el Presidente de la República Dominicana, Luis Abinader Corona dejaba inaugurada en Puerto Plata una Terminal Crucerista con un costo aproximado "80 millones de dólares y, anunciaba para nuestro Centro Histórico una inversión de ciento cincuenta millones de pesos", esta no conozco que se haya materializado.
No soy hipócrita, me apasiona el crecimiento y desarrollo integral porque ese proceso bien conducido apuntala un progreso sostenido.
Los países que han abrazado la Industria Turística como soporte de su economía lo han demostrado con un esfuerzo de conjunto para lo que han tomado en cuenta a todos los actores y transparentado todos los recursos a su alcance.
Más, lamentablemente debo decir en mi opinión, que Puerto Plata fue el primer Polo Turístico de la República Dominicana, iniciando sus operaciones entre los años 70's-80's y por múltiples razones no ha logrado hacerse sostenible; siendo una de las más comunes que el beneficio que genera no permea al grueso de la sociedad.
Para muestra basta un botón, la construcción y puesta en operación del Puerto Turístico en nuestra Bahía trajo como consecuencia el desplazamiento del Puerto de Carga hacia la zona Oeste del área portuaria, lo que suponía el beneficio del desalojo de las personas que residen en ese entorno; eso no se materializó y el ambiente que se respira en aquel espacio es inhumano, desconsolador, trágico, mortífero y, todo lo que usted pueda imaginar.
Para iniciar, le construyeron una pared que los aisla de su hábitat natural y le quita su contacto con el Océano Atlántico, la misma que provoca que cuando llueve sus casuchas se inunden y se les dañen sus pertenencias; la contaminación sónica no les permite conciliar el sueño ni le deja paz a ninguna hora del día ni de la noche, el humo y el polvo que generan los equipos en las operaciones permanentes del Puerto de Carga les provocan todo tipo de enfermedades de: la vista, las via respiratorias, pulmonares, de la piel, entre otras, sin que a nadie le llame la atención.
Se supone que los administradores del Estado tienen un permanente compromiso social con sus representados al igual que las empresas nacionales y/o extranjeras cuando se instalan en un entorno donde habitan seres humanos, lo mismo que los Dirigentes Comunitarios también tienen el suyo propio.
Cuando el bienestar de la actividad principal de una provincia o de un país no se refleja como progreso en la calidad de vida del colectivo, este no se identifica con la misma y por el contrario, promueve el rechazo.
Si queremos hacer del Turismo la Industria Punta de Lanza de nustra Economía y que sea sostenible en el tiempo, no podemos permitirnos que se continúe arraigando en la mentalidad de nuestra gente la idea de que el Turismo genera oportunidades pero, que ademas, arrastra grandes desigualdades.
¡Pongamos atención a los moradores del entorno del Puerto de Carga en Plata Oeste y, recordemos que el bienestar de unos no debe ser la desgracia de otros!