Por un Eficiente Imperio de la Ley

Ultima Actualización: martes, 01 de diciembre de 2020. Por: Ramiro Francisco

Por: Ramiro Francisco

Ahora se le llama tendencia o corriente a lo que se publica de manera constante en los medios tradicionales y redes sociales.

Sin temor a equívocos se puede afirmar que las últimas tendencias han sido necesariamente la pandemia del Covid-19, el toque de queda y los apresamientos, respuesta oficial respecto a las atenciones, controles y medidas desde el Ministerio de Salud Pública, declaraciones de la dirigencia del PLD sobre manejos del gobierno en áreas diferentes.

Pero, no obstante, sin embargo, la tendencia que ha marcado precedentes hasta ahora es, los apresamientos hechos por la Procuraduría General de la República contra ex funcionarios y proveedores del Estado acusados de corrupción.

Desde la madrugada del domingo cuando explota ante la sociedad dominicana el operativo Anti-Pulpo, llamado así presuntamente por las ramificaciones o red que tienen los imputados, no hay periódico alguno digital o impreso, programa de radio o televisión, muro o página web, en los que no se trate el tema.

Es más, hasta algarabía, contentura y toque de cacerolas se ponen de manifiesto. La organización Participación Ciudadana dijo esperar que el arresto de esas personas sea el inicio del fin de la impunidad. (Acento.com 30-11-20).

Se destaca, la prudencia y buen tacto del presidente del PRM Lic. José Ignacio Paliza y alto funcionario del gobierno, al rehusar referirse a esos apresamientos cuando fue abordado por los periodistas para” evitar malos entendidos”.

No hacemos mofa de los funcionarios involucrados y apresados. Hemos de tener presente, que algún día se tiene que poner freno a tanto hurto e impunidad dentro del Estado.

Al redactar, recibimos con tristeza la información de la muerte por suicidio del ex administrador del Plan Social y ex superintendente de Electricidad César Prieto, durante el gobierno de Danilo Medina, envuelto por igual supuestamente en escándalo de corrupción.

Hay quienes ponen en duda las acciones tomadas por ahora. La califican como “circo, teatro, más de lo mismo”, debido a lo acostumbrado hasta el momento con lo de Odebrecht, aunque este ha dado un giro sorprendente.

Estoy entre quienes creen, que el Ministerio Público y la Procuraduría General, tienen en sus manos enviar señales claras de una buena y correcta administración de justicia. Sin prisa, sin atropello, sin desmanes, siguiendo aquello conocido como el debido proceso y rescatar la confiabilidad perdida.

Que sigan ofreciendo señales claras, muy claras no solo a ex funcionarios y colaboradores, sino a los actuales del presente gobierno. República Dominicana, debe y puede mejorar y ser un país digno de mejor suerte.