PUERTO PLATA.- Lo ocurrido en el 1997 con la formación del famoso Delfinazo para perjudicar a Puerto Plata, constituyó un intento de ejecutar un adefesio jurídico parido de mentalidades cavernarias y perversas que aun pululan en las sombras del ambiente deportivo de la República Dominicana.
Este hecho constituyó de parte de sus gestores, un primor de vergüenzas alrededor de la franquicia de Puerto Plata (Delfines del Atlántico) y los hechos alrededor de este caso fueron desvelados el 5 de junio del año 1997 por el periodista puertoplateño, Ramón Jérez (fallecido), quien laboraba en Santo Domingo como redactor deportivo en el periódico Listín Diario.
En ese contexto Jérez escribió lo siguiente: "Un Delfinazo", un abogado registra nombre y constituye compañía para reclamar la propiedad de los Delfines del Atlántico, pero los puertoplateños reaccionan indignados.
Como un "delfinazo" fue calificado en Puerto Plata el anuncio de un abogado capitaleño Teófilo Estévez Flores quien registró el nombre de los Delfines y constituyó una compañía para para operar la nueva franquicia otorgada a Puerto Plata por el Congreso Nacional.
Estévez Flores quien aparece como presidente de una compañía con el nombre del equipo puertoplateño, autoriza una declaración de prensa, entregada en la recepción del Listín Diario (4-6-1997), en la que informa haber completado la formación legal de los Delfines del Atlántico y que está preparado para recibir los beneficios de la ley aprobada recientemente en el Congreso Nacional, la cual les otorgó una franquicia para participar en los campeonatos nacionales del béisbol profesional.
En su reseña, el comunicador Jérez revelaba que de inmediato, los propietarios del proyecto que se originó en Puerto Plata o para crear un nuevo club de béisbol, anunciaron que no tienen ninguna relación con Estévez Flores y denunciaron que lo anunciado forma parte de un plan para afectar la participación del equipo en el torneo otoño invernal, tras una consulta del Listín Diario.
Las declaraciones de prensa del presidente de la nueva compañía "Delfines del Atlántico S. A.", contiene sutiles críticas a los empresarios y políticos puertoplateños y además sugiere un estudio de factibilidad y de precipitaciones pluvial (lluvias), ya que "somos nosotros los primeros los primeros y principales interesados en que las cosas se hagan sobre bases sólidas que garanticen el éxito de la franquicia. La comunidad puertoplateña no nos perdonaría una aventura económica que desdiga de su madurez", señaló esa nota que no tenía firma.
Influencias políticas y económicas
En otros de los párrafos, Estévez Flores expresa su "agradecimiento al Congreso Nacional, en las personas de nuestros ilustres legisladores Kuky Silverio y Víctor Ortega, por darle prioridad a los propietarios abriendo las puertas de este viejo sueño de la comunidad puertoplateña. A nuestros distinguidos empresarios Ramón Gilbert, Chichí Redondo y Juan Carlos Morales, por el desinteresado respaldo moral brindado al poner su prestigio y sus influencias políticas y económicas al servicio de este proyecto".
Informó, asimismo, el supuesto presidente de los "Delfines" que la compañía fue constituida con un capital original pequeño (diez mil pesos), pero de inmediato se hará un aumento de capital a fin de dar oportunidad a todos los puertoplateños para que inviertan en su equipo.
"Estamos además en contactos con inversionistas del estado norteamericano de Florida, que por su vecindad con Puerto Plata han manifestado interés en el proyecto. Como es natural, contamos las importantes inversiones que seguramente harán los empresarios locales, encabezados por quienes fueron puntales en la lucha por la obtención de la ley, los señores Gilbert, Redondo y Morales, el senador Silverio y otros, en cuyo desinterés y amor por su pueblo cifra la comunidad puertoplateña sus mejores esperanzas".
Reacción
Los Delfines del Atlántico que habían advertido hace dos semanas el plan que se gestiona para crear un conflicto legal con el registro del nombre del nuevo equipo, como lo publicó el periódico Listín Diario en exclusiva, reaccionaron indignados frente al anuncio falaz del abogado Estévez Flores.
A nombre de la nueva franquicia del béisbol invernal, habló el empresario José Joaquín Redondo Gómez (Chichí) y autorizó la siguiente declaración:
"Los dirigentes del equipo de Puerto Plata, Delfines del Atlántico, que durante los últimos siete años han estado trabajando arduamente para obtener una franquicia del béisbol profesional para Puerto Plata, se mostraron altamente sorprendidos por la supuesta formación de una compañía por acciones, fantasma, con un capital de diez mil pesos, denominada Delfines del Atlántico, S. A., y el registro del nombre del equipo en la Secretaría de Industria y Comercio”.
"Desconocemos quien es la persona que firma como licenciado Teófilo Estévez Flores, por lo que interpretamos que se trata de una patraña con fines de crear problemas legales a la verdadera franquicia de Puerto Plata".
"Esta acción se inscribe en lo que podría interpretarse como un plan de entorpecer la operación de la franquicia, y se teme aquí, en Puerto Plata, esto estés siendo manejado por los mismos actores que públicamente han estado poniendo obstáculos a este ambicioso proyecto, ya aprobado por las cámaras legislativas de la República Dominicana".
En la próxima entrega conoceremos el por qué el "Delfinazo" tocó al presidente de la LIDOM, Leonardo Matos Berrido y el listado completo de los accionistas de la compañía fantasma registrada por Estévez Flores.
(Continuará).