Politólogo Luis Columna Solano, analiza consecuencia de impedimento del voto en el exterior

Ultima Actualización: lunes, 06 de abril de 2020. Por: Luis Columna Solano

Por: Lic. Luis Columna Solano

SD. La situación de pandemia que declaró lo Organización Mundial de la Salud (OMS) a consecuencia del mortal virus COVID-19, ha sido la causa principal para que el gobierno de Estados Unidos expresara por la vía diplomática a República Dominicana, que si desean que los cientos de miles de dominicanos residentes en su territorio voten en las elecciones presidenciales y congresuales pautadas para mayo, tendrían que buscar o recurrir a otro método que no sea presencial.

 

Esta decisión se suma al grave estado de emergencia sanitaria que viven España e Italia, los dos países europeos donde residen la mayor cantidad de dominicanos; asimismo Suiza, Holanda, Reino Unido y el resto de la Unión Europa, lo que hace suponer que igualmente en Europa será imposible la participación electoral de forma tradicional. Dicho esto cabe preguntarse. ¿Que pasarían con la elección de los diputados de ultramar?

 

Al respecto somos de opinión de que el liderazgo político y demás actores sociales tendrán que acordar un método de participación que garantice esa escogencia, pues de lo contrario, estaría frente a un vacío legal y una falta de legitimidad. Recordar que la Cámara de Diputados tiene una matrícula de 190 diputados, entre los cuales están los siete en representación de la diáspora en el exterior  y son elegidos a razón de: 3 por Estados Unidos y Canadá, 2 por la jurisdicción del estado de la Florida (USA), Caribe y el resto de la Latinoamérica y 2 por Europa.

 

La situación es la siguiente: si el liderazgo y los principales actores del sistema político dominicano más el resto de los agentes sociales llegan a un acuerdo para posponer las elecciones dentro del actual periodo constitucional, tal y como lo han propuesto algunas personalidades, no habría problemas en elegir al presidente y vicepresidente(a) de la República y los 32 senadores, pero solo se podrían elegir los 178 diputados de representación proporcional de 1 por cada 50 mil habitantes, 5 nacionales para partidos con poco representación que sumarian 183, pero faltarían los 7 del exterior ya que desde el territorio nacional no pueden ser elegidos. Igualmente se podria elegir los 20 diputados al Parlamento Centroamericano (PARLACEN)

 

Una posible solución al caso, sería que los partidos acuerden con la Junta Central Electoral (JCE) la implantación del voto por correo, una modalidad que está habilitada en los países más desarrollados del mundo y que los dominicanos nunca hemos utilizado. No obstante para hacer esto posible, se tendría que construir todo un andamiaje estructural que necesariamente requeriría la participación del Cuerpo Diplomático y Consular como herramienta de soporte principal de las Oficinas para el Registro de Electores en el Exterior (OPREE), como se les conocen las oficinas de la Junta Central Electoral fuera del país, iniciativa  que difícilmente lograría el requerido consenso entre los líderes políticos de los distintos partidos con presencia en el exterior.

En los actuales momentos los líderes del país empezando por el presidente de la República Danilo Medina y los candidatos presidenciales:  Leonel Fernández, Luis Abinader, Gonzalo  Castillo y Guillermo Moreno han expresado su preocupación por la salud del pueblo dominicano,  pero deberán abordar este asunto oportunamente más temprano que tarde, pues el sostenimiento del sistema institucional y los mecanismos de participación y de representación democrática son pilares de la democracia y por lo tanto, requieren una vigilancia permanente como garantía de un verdadero estado social democrático y de derecho.

Por lo tanto, es necesario que la elección de los diputados de ultramar entre en la agenda gubernamental, institucional y política de todos los actores implicados. De lo contrario habría que hablar de una modificación constitucional y en ese punto no habría consenso.