La adquisición de inmuebles en La Vega y nuevas edificaciones

Ultima Actualización: sábado, 21 de enero de 2023. Por: Rafael Hernandez

A mí me gusta escribir y he sido dotado para ello, si lo hago bien, muy bien o mal no importa, simplemente escribo lo que me llama la atención


A mí me gusta escribir y he sido dotado para ello, si lo hago bien, muy bien o mal no importa, simplemente escribo lo que me llama la atención.  No me importa que me llamen ignorante, ni que me den boches porque no soy ingeniero ni arquitecto urbanista. Igual que si me envían virus, me hackeen o se quejen en Facebook para que me sancionen. Los recibo todos con humildad, consciente de que están diciendo la verdad, aunque bastante irritados conmigo por lo que digo, que también es mi verdad, y aunque no la respeten, yo sí espeto las suyas, pues ellos son los profesionales capacitados y quienes tienen la autoridad para que las cosas que pasan NO PUEDAN PASAR.

Otra cosa es que cumplan o no con lo que tienen que cumplir y que vivan echando las culpas a los incumbentes anteriores.

1-He visto con mucho pesar cómo vienen las gentes al sector donde vivo detrás de todas las casas que tienen un letrero de Se Vende. Las compran y no se mudan. Comienzan a remodelarlas y después de dar una millonada por ese inmueble, gastan otra millonada remodelando. Uno solo escucha las mandarrias rompiendo paredes, columnas y vigas, para readecuar el espacio al gusto del comprador.

2- Dada esa situación crítica cuando me ha tocado tratar el tema, he dicho que debieron de comprar un solar y buscar a un arquitecto que les hiciera el diseño que se ajustara sus deseos y construir una vivienda nueva, porque, a) les salía más barato; b) se acomodaba desde un principio a sus deseos; c) es una edificación nueva, mientras la remodelada siempre seguirá siendo vieja.

3- Oigo las críticas y comentarios -algunos perversos-, de que obras públicas y ayuntamiento autorizan dichas remodelaciones en algunos casos y en otros se realizan sin ningún control.

4-Los ingenieros  tienen el deber de supervisar a los llamados Maestros Constructores, ya que algunos de ellos se lanzan a trabajar como si fueran reales ingenieros y toman decisiones que pueden afectar la estructura del inmueble en cuestión.

5-En toda la ciudad se están levantando edificaciones nuevas y haciendo remodelaciones. Somos bastante entrometidos y cuando vemos esas grandes construcciones nos detenemos a preguntar por el área de parqueo. Sucede que casi siempre no cuentan sino con las calzadas por donde deben circular los peatones. A cada rato, los que tenemos el privilegio de caminar a pie, nos obligan a tirarnos a las calles porque los parqueos-calzadas no dejan espacio para nosotros pasar con normalidad. Consideramos que una de las exigencias que deben hacer las instituciones reguladoras de las construcciones, es exigir que en el plano esté especificada el área de parqueo que no sea en  las calles ni calzadas y que responda a las reales necesitadas de los usuarios de dicho inmueble. Pero hasta ahora eso no es así y podemos señalarles múltiples casos del centro de la ciudad donde hay construcciones recientes en esquinas donde hay oficinas múltiples que implican extensas áreas de parqueo y carga, donde no hay ni uno solo, pues están robándoles el espacio de la calzada a los peatones. Usurpan el espacio público.

6-Debe haber consecuencias para quienes violenten las normas de construcción, sean los mismos propietarios, ingenieros, arquitectos o maestros constructores. Quienes deban ser separados de la carrera, deben ser sometidos a una experticia de especialistas, y si hay que suprimirle el execuátur, que no les tiemble el pulso para hacerlo. Y esto, suponemos que los llamados maestros, tienen un certificado o licencia que los autoriza a ejercer dichas funciones. Todo está en cuestionamiento. Y se supone que quien los contrata debe exigirles dicha licencia.

7- Como siempre, se espera que ocurra una tragedia para poner caso a las constantes denuncias, ya tenemos una. No debemos esperar que se presenten otras. Hay edificios que han sido construidos con más niveles de lo que se especifica para esta ciudad y nada ha pasado, pero puede pasar, pues todo ocurre un día. Es el momento de conformar un equipo de profesionales que sea implacable y que haga un chequeo técnico a todos esos inmuebles del sector comercial como residencial donde a simple vista se observan vicios de construcción o que hayan sido remodelados, y no que sea con un sismo que se descubran las fallas, porque entonces ya no habrá remedio.