Tener un carro es probablemente la primera meta financiera de la mayoría de dominicanos.
Tener un vehículo mejora la calidad de vida, de cualquier ser humano que debe transportarse para llevar sus hijos al colegio, ir a trabajar etc.
¿Pero que pasa cuando cualquiera agarra un guía en el país?
¿Que pasa cuando una persona es recurrente en accidentes de tránsito?
Pienso que ahora que existe un exceso de vehículos en las calles y los accidentes trágicos van en aumento , que aún en ciudades pequeñas ya estamos experimentando tapones y caos en las vías, es el momento correcto para filtrar mejor a quien se le da una licencia de conducir.
Por que la verdad es que no todo el que puede comprarse un carro tiene la capacidad, inteligencia emocional, paciencia y prudencia para andar en las calles.
No es casualidad que seamos el país con mayor mortalidad por accidentes de tránsito, algo mal estamos haciendo.
En otras naciones tener un carro es un lujo que sale caro, te cobran por usar las vías, te cobran por paquímetro, te cobran por pasar de un estado a otro.
¿Ustedes saben que logran con esto? que antes de que un indivíduo tome la decisión de comprar un carro lo piense bien.
Pero me toca decir también que esas naciones adecuan los medios de transportes públicos para que sus ciudadanos tengan calidad y seguridad al transportarse.
Entonces nuestras autoridades deben tomar cartas en el asunto, por que se nos está saliendo de las manos el tema.