Realmente el polo desarrollo turístico de la Zona Norte, caracterizado por una incuantificable cantidad de cosas preciosísimas que nos dotó la naturaleza, las que han permitido que se nos haya bautizado con una cantidad de sobre nombres tales como la Tacita de Plata, la Novia del Atlántico, la Costa de ámbar entre otras denominaciones, pero creo que hace falta que las manos, del hombre y sobre todo de nuestras autoridades, deben poner mayor empeño en que los turistas que nos visiten, encuentren en el epicentro de la ciudad, los atractivos indispensables por los cuales ellos se sientan atraídos al visitar nuestro pueblo.
Por lo que escucho decir, independientemente del teleférico, una notable cantidad de los cruceristas que nos visitan, por no existir los lugares adecuados en el centro de la ciudad, optan por decidirse por otros tipos de excursiones, cosa que no criticamos por la diversidad de lugares que tenemos, pero entiendo que la ciudad debe ofrecer algunas atracciones envolventes, que estimule a que una mayor cantidad de ellos pernoten en la nuestra ciudad y a la hora de partir se sientan regocijados y hasta con el ánimo de invitar a sus amigos a visitarnos y hasta ellos mismos querer retornar por lo bien que se sintieron por las cosas que disfrutaron.
Me Pregunto ¿ QUE HACE ESE ELEFANTE BLANCO, como lo es nuestro ANFITEATRO, que se mantiene en un total abandono, cuando ese lugar, puede ser reconvertido en un centro de espectáculos populares, especialmente cuando estén los cruceros de Amber Cove y Taino Bay y presentarle a los visitantes nuestra música el merengue, bachatas, salsas y sones, un evento que puede durar unas dos o tres horas de duración, donde se les cobre una módica suma y se creen espacios donde ellos puedan bailar o aprender esos ritmos.
Solo se requiere, que las ideas que presento y nuestras autoridades se pongan las pilas y busquen las consultas de nuestros arquitectos e ingenieros y consulten la manera de ´como techar adecuadamente ese lugar y se convierta en un epicentro de actividades motoras e incentivos de nuestros artistas locales, donde estos encontrarían una manera de lograr ganarse algunos pesos por sus actividades.
Se me ocurre pensar, que además de las ideas que expongo sobre nuestro anfiteatro, en su cercania se encuentra la legendaria Poza del Castillo, lugar de baños de miles de puertoplateños y fuente inspiradora de nuestro laureado compositor Juan Lockward. Me uno a quienes piensan que ese lugar debe ser saneado y crearle una bonita estructura, que hagan el lugar atractivo y con una bien manejada promoción como por ejemplo que diga YO ME BAÑE EN LA POZA DEL CASTILLO. Eso sería una especie de otro valor agregado al turismo local.
No se, si el sonido de estas observaciones, despertará los oídos de quienes tienen que velar por el progreso y desarrollo de Puerto Plata y se adhieran a estas humildes opiniones y en no lejanos tiempos, se puedan implementar, como una manera de seguir posesionando a nuestra región hacia un futuro promisorio, y estas cosas no se escapen por la falta de voluntad de quienes tienen
la responsabilidad de fortalecer la economía de nuestra región. Estimo que una perfecta combinación entre el Ministerio de Turismo, de Cultura y el Ayuntamiento Municipal, podrían cambiar todo el panorama de esa zona y darle una ambientación de mucho interés para los residentes de nuestro pueblo y de quienes nos visiten. Del Malecón he dicho en varias oportunidades que, si el Balneario Colon Long Beach en los años 50, 60 y hasta más allá de los años 70, fue el centro de bañistas de todos los pueblos del Cibao, porque 50 años después el Malecón de nuestro pueblo, no se pueda convertir en el Balnearjo del Caribe.
No dejemos que nuestros visitantes tengan que buscar otros lugares de diversión, cuando en el centro de la ciudad podemos desarrollar algunos eventos que ellos se sientan complacidos de haber visitado un pueblo con abundante diversión, que los invite nuevamente a retornar, por eso digo QUÉ DEBEMOS SER CRUCERISTAS Y ALGO MAS.