Usted tiene ese derecho, nadie se lo podrá negar; pero no es 100% legítimo ni ético, porque usted no se va a encerrar solo, en un lugar, mientras dura la pandemia.
Esto aplica para toda la población, pero incide más en grupos específicos de ocupaciones donde su vínculo con el usuario, cliente, o familiar es muy cercana. Entre estos podemos incluir los sobrecargos de aviones, asistentes de transporte público masivo, instructores de gimnasios, spas, etc.
El grupo en que no se debe permitir su negación a vacunarse es en EL SECTOR SALUD, por razones en las dos vías: (1) se encuentran en un entorno de alto riesgo de contagiarse, y (2) interactúan muy frecuentemente con personas con muy alto riesgo de complicarse y morir, como son los enfermos crónicos que abarrotan los centros de salud.
En estos caso ha de pesar mucho más el sentido común, la ética y la legitimidad de nuestras acciones, frente al derecho individual.
20 de mayo del 2021.