Esta es una situación muy frecuente durante la epidemia, en especial cuando se incrementan los casos positivos y enfermos. Muchas personas nos llaman pidiendo recomendaciones sobre qué hacer.
Saben que una persona cercana fue diagnosticada con COVID-19, y estuvo en contacto con ella justo antes de saberlo.
Lo primero que hay que entender es que la transmisión no es automática; menos aún si tenias la mascarilla puesta y mantuviste el distanciamiento prudente. En ese caso el riesgo es realmente muy bajo.
Sin embargo, hay algunas medidas que sí puedes tomar para tratar de reducir al mínimo el riesgo, todas ellas orientadas a crear una barrera efectiva que no permita que el virus, que pudo haber "entrado" a su cuerpo, se replique y pueda alcanzar una carga suficiente para desarrollar la enfermedad; y contagiar a otros, aunque esté asintomático.
Por ejemplo:
1. REFORZAR LA DEFENSA INMUNE DE SU CUERPO. Para ello hay muchas medidas, algunas probadas, otras puramente empíricas. Por ejemplo:
Usar la combinación de Zinc - Vitamina C - Vitamina D3, lo ayudará a limitar el libre efecto del virus dentro de la célula.
2. HIDRATAR CORRECTAMENTE SU CUERPO.
No hay la menor duda de que la deshidratacion es una condición que favorece la replicación viral rápida; en gran medida porque sus anticuerpos ptotectores no pueden actuar a libertad, y por la acidez que acompaña a la perdida de líquidos, misma que también favorece el "crecimiento" del virus. Debe tomar entre 2 a 3 litros de líquidos sin alcohol, al dia, por 3 a 4 días.
3. REPOSO PARCIAL DURANTE EL PERIODO PRODROMICO DE LA VIROSIS (los ~5 días que ocurren desde el contagio a la aparición de sintomas).
De igual forma, el reposo y sueño reparador permite que las defensas del cuerpo se activen mejor. Durante la fase aguda e inicial de una infección no conviene ejercitarse mucho; es un error que muchos cometen. Dele descanso a su cuerpo por 3 a 5 dias.
4. MANTENER UN AMBIENTE ALCALINO Y CALIENTE DE LA NASO-FARINGE. USAR VIRUCIDAS TOPICOS EN LA NARIZ.
Varias investigaciones apuntan a que el virus del Covid-19 (Sars-cov-2) es muy poco resistente a la resequedad, el pH alcalino, y al calor. Se entiende que la puerta de entrada principal es la vía respiratoria superior (nasofaringe); ahí es donde primero se aloja y comienza a manifestarse. Por eso conviene hacer enjuagues bucales con gárgaras de agua caliente carbonatada, y tomar un té caliente antes de ir a la cama. Existen algunos aerosoles en el mercado, con medicamentos antisépticos y antivirales topicos, que sus desarrolladores les atribuyen efecto protector. Eso aún está muy poco estudiado, y sus resultados son más bién anecdóticos.
5. USAR UN MEDICAMENTO ANTIVIRAL SISTÉMICO EN DOSIS PROFILÁCTICA POST-EXPOSICIÓN TEMPRANA. .
Desde el inicio de la pandemia, el mundo médico ha estado trabajando con múltiples medicamentos antivirales. Una de las situaciones que más demanda de ellos es como preventivo (profilaxis) para aquellos individuos con alta tasa de riesgo de contagio, como es el personal de salud. Al momento actual tenemos múltiples estudios de investigación que han mostrado cierto efecto profiláctico de esos medicamentos; en especial la Hidroxicloroquina y la Ivermectina.
Nuestro grupo de investigación favorece la IVERMECTINA por varias razones prácticas, y porque su efecto ha sido más comprobado que los demas.
Al dia de hoy se han propuesto varios esquemas de prevencion; con dosis y tiempos diferentes; lo importante es que sea administrada en los primeros tres días después del contacto. Su médico deberá recomendarle el esquema que considere en base a su experiencia.
6. EVITAR CAER EN UNA CRISIS DE ANSIEDAD.
No hay razón para crear un estado de nervios patológico. No ayuda para nada. El riesgo de esta enfermedad es menor cuando se atiende y trata a tiempo. Los pacientes que agravan y/o mueren son principalmente aquellos que se descuidan. Nuestra dolorosa experiencia nos dice que el tratamiento muy tardío es el común denominador entre más del 80% de los fallecidos.
En ese sentido, no hay que caer en pánico; simplemente cuidarse bien.
Dr. José Natalio Redondo