PUERTO PLATA.- El presidente de la Comisión Permanente de Efemérides Patrias (CPEP); Juan Pablo Uribe, exhortó a la población nacional mantener la unidad para seguir defendiendo la soberanía de la República Dominicana.
Uribe emitió sus declaraciones en esta ciudad atlántica durante la ceremonia conmemorativa del 185 aniversario del natalicio del general Gregorio Luperón, a quien definió como “el titan restaurador que con su espada épica hendió el cuerpo de la traición vendepatria”.
Sostuvo que Luperón tuvo el honor de en su juventud veinteañera y comprometida con la nacionalidad ser el protagonista indiscutido de la Guerra Restauradora en contra del imperio español y en la guerra de los seis años contra las pretensiones antinacionales de Buenaventura Báez.
Manifestó que el prócer puertoplateño fue presidente democrático y progresista de la República en el 1879, consciente de sus obligaciones reciprocas con la sociedad, caracterizándose por la tolerancia política y el amor a la humanidad.
“El general Gregorio Luperón tuvo siempre bien claro que ser dominicano era redactar brillantemente nuestra historia con la espada de los libres, poseer un territorio vasto, respetado, hospitalario, además de saber escarmentar a cuantos pretendan hollar nuestra dignidad”, expresó.
De igual manera, añadió que Luperón tuvo la imagen bravía del patriota que pletórico enarboló los sentimientos del orden, y la justicia, del derecho, de la lealtad, de la moral, del progreso y del bien general que nacen indudablemente del amor a la patria.
Instó a los dominicanos a dejarnos seducir por el General Gregorio Luperón quien con su imponente figura de gladiador victorioso de la patria que él siempre amó , respetó y defendió sin importar riesgos y sacrificios teniendo como divisa suprema los intereses soberanos, identitarios y de autodeterminación de la República Dominicana.
Finamente, manifestó que el prócer conocido popularmente como “La Primera Espada de la Restauración” estuvo por encima de todos los intereses personales, partidistas y mezquinos, lo que se traduce en términos políticos, ideológicos y bélicos, en que proyecto su dominicanidad por siempre.