El Nido y la Pava

Ultima Actualización: viernes, 18 de marzo de 2016. Por: Ramiro Francisco

Tendrán que buscar otro nido. La pava no quiere el que le presentan.

 Tal vez cuandonuestra sociedad disponga de una Ley de Partidos dejaremos de tener estaespecial de circo y “haladera de moños” de los que hemos sido testigo en casitodos los partidos políticos del sistema, para presentarnos sus hombres ymujeres por quienes deberemos votar en las venideras elecciones.

¡Cuántas triquiñuelas! Es “alta política” nos enrostranalgunos dirigentes.

Las malquerencias se multiplican. Los epítetos impublicablescontra algunos de las altas instancias o directivos de partidos, se ponen demanifiesto por personas que han sido movidos de posiciones o en el peor de loscasos han quedado fuera de la boleta electoral.

Heridas profundas y otras de pronósticos reservados que nosanan, aún pasadas las elecciones.

Los candidatos que “arrastran” cual locomotora y llevanpesadas cargas se les nota un dejo de preocupación, aunque quieran ocultarlocon una amplia sonrisa.

Aquellos a quienes se les suman los votos dicen sin hablar,que hay quienes están en la boleta que no le aportarán el “caudal de votos”calculados.

Encuestas desacreditadas vienen y van, y todos se dan porganadores. Desde los medios nosotros como “bocinas sin sonido” y sincredibilidad, pretendemos llevar a los electores la percepción encomendadadesconociendo –craso error- que muchos de quienes nos escuchan leen y analizanmejor que muchos, el panorama político nacional, provincial y sobretodo ellocal por estar más cerca y poder palparlo con toda su crudeza.

Es verdad, que en cincuenta y tantos días la intención delvotante puede cambiar…pero no en todos.

Hay mucho temor, “meneo” e intento de congraciarse en todo ycon todos. Lo que se dejó de hacer por años querrán hacerlo en semanas.

Tendrán que buscar otro nido. La pava no quiere el que lepresentan.