Nuevo escándalo policial

Ultima Actualización: martes, 30 de diciembre de 2014. Por: Ramiro Francisco

Nueva vez sale a la palestra pública los casos de corrupción dentro de las filas de la Policía Nacional.

Cuando los males no se arrancan de raíz, se corre el riesgode que hagan metástasis, empeoren la salud y puedan hasta provocar la muerte.

Nueva vez sale a la palestra pública los casos de corrupcióndentro de las filas de la Policía Nacional. En esta ocasión, en la DirecciónCentral Antinarcóticos DICAN.

Todos los medios de prensa nacionales impresos y digitales,radio y televisión se han hecho eco de esa información.

Grandes titulares muchos de ellos a cuatro columnas, llamanla atención de los lectores El vespertino El Nacional publicó en su edición del29, que un coronel y varios oficiales de la Policía estaban bajo arresto einvestigación por una junta de generales y organismos de inteligencia delgobierno, por sospechas de cometer irregularidades  y la desaparición de drogas por un valor de50 millones de pesos.

Rápidamente, la jefatura de la policía negó, que el directordel DICAN coronel Carlos Fernández Valerio, esté bajo arresto. Se dijo –eso sí– que en sus funciones estará el coronel Francisco Bloise Olmeda.

Los que conocen de estos asuntos policiales sostienen, quela Ley de Reforma para esta institución, dormirá el sueño eterno, mientras  el congreso y en la misma policía seencuentren permeados por personas corruptas.

Podrán venir ex jefes policiales de otros países, congrandes experiencias adquiridas en la transformación de esos organismos, contarlas mismas, y aquí no se les hará caso, debido a que para muchos, es mejorvivir del caos y del desórden.

Si como nación tenemos una Dirección Nacional de Control deDrogas DNCD, por qué la creación de una Dirección Central de AntinarcóticosDICAN?

Están las investigaciones en las que participan dosfuncionarios de la procuraduría…los fiscales Iván Lorenzo y José AlbertoJiménez. Pesquisas, que las más de las veces, se quedan a medias y sinresultado alguno.

Nos sumamos a la lista de quienes creen, que no todos losmiembros de la Policía Nacional son corruptos. Los hay buenos, decentes yhonrados. Pero algo anda muy mal en la uniformada desde hace tiempo.

El gato necesita un cascabel y no por Navidad.