FABIO GARCIA AQUINO UN MAESTRO

Ultima Actualización: lunes, 08 de febrero de 2021. Por: Rafael Hernandez

Por: Rafael Hernández

No todo el mundo puede llevar el título de Maestro. Para mí este término tiene una connotación muy especial, para aquellos que han dado cátedra a los otros maestros y a la sociedad en general.

 

Él falleció ayer en playas extranjeras. Fue otra víctima del Covid-19 que lo mantuvo sufriendo, pero como cristiano convencido tranquilizó a su familia, diciéndole que "ya mi obra está hecha". Esto quiere decir muchas cosas. Cuando una persona siente que hizo lo que tenía que hacer, ya está preparado para lo que venga, siempre por voluntad superior.

 

Le conocí cuando todavía yo cursaba el bachilerato, en la parte final de la calle Juan Rodríguez. Allí había una especie de Contenedor del río Camú, en concreto, sobre cuya superficie los jóvenes interactuábamos. Allí conocí a los hermanos Espinal. Olaya y Mayobanex, a Plinio el Pachango, bueno y a tantos que sería prolijo enumerar. La casa al final a la derecha era la del profesor Danilo Ramírez (EPD), íntimo amigo del también profesor Emiliano Mejía (EPD), quien lo visitaba con cierta frecuencia. Ahí mismo se iniciaba la calle recién denominada Ramoncito Espinal y en la segunda casa se estableció la familia Núñez-Ureña, compuesta por Rafael Núñez y Matilde Ureña quien también era profesora. Esa era la casa donde veíamos al Maestro Fabio García, relativamente alto para el común, pero siempre fornido, un hombre fuerte y siempre bien vestido.

 

En casa de Matilde vivía Lesbia, una singular muchacha parte de su familia, muy simpática y que interactuaba con todos nosotros de manera muy amena. Cuando Fabio iba conversaban mucho y uno que otro muchacho empezó a sentir ciertos celos, totalmente infundados como son todos los celos. Pues Fabio era un hombre muy sano, generoso y también conversador, con quien también conversábamos.

Al pasar el tiempo vino a Trabajar a la escuela Mercedes Morel que funcionaba detrás del cementerio donde ahora hay una Ferretería. Luego estuvo en el colegio Agustiniano y a partir de 1973 por las tardes en el Colegio Vega Nueva, donde llegó a ser nuestro Director.

 

Pocas veces le toca a uno tener un director, un amigo y un cómplice. y eso fuimos Fabio y Yo. Era que desde que se formó la primera Asociación de Maestros Veganos, nos tocó ser directivos a ambos, luego cuando se formó la ADP ambos estuvimos en el Comité Gestor. Entre nosotros siempre hubo empatía en ideales y acciones. Así que como Director siempre fue un consejero y mi apoyador en todo cuanto mi febril cerebro se proponía, en esos momentos de represión y persecuciones que desgraciadamente tuvimos que soportar.

 

Qué decir? Bueno en 2003 nos encontramos brevemente en Puerto Rico donde vivía, y tuvimos un reencuentro maravilloso junto a su exquisita esposa Hilda Grullón que hoy ha pasado por la pena de verlo marchar primero, cuando realmente soy testigo, de que nunca vi una pareja más unida que esa. Sus hijos Darío (de otra unión anterior), Edgar y Darvin no pudieron tener una mejor crianza, y así crecieron dentro de los valores cristianos que profesaron sus progenitores.

 

!Adios Fabio! Dondequiera que estés siempre te recordaremos como fuiste. Hasta pronto, ya tendremos la oportunidad de reencontrarnos en otra dimensión.