PUERTO PLATA. - A pesar de la alerta roja emitida por la amenaza del huracán María y su inminente paso muy cercano por nuestro territorio, la situación en esta provincia se caracteriza por una calma muy relativa al estado de emergencia imperante.

Al caer la tarde del miércoles, la temperatura se tornó muy calurosa y el cielo comenzó a nublarse, registrándose exactamente a partir de las 6:35 un torrencial aguacero, volviendo a llover copiosamente a las 11:53 de la noche, esta vez, con ráfagas de vientos.

Mientras que las autoridades iniciaron a las 4:30 dela tarde las evacuaciones obligatorias hacia los albergues previamente establecidos de numerosas familias quienes acogieron el protocolo de                     alerta implementado con la finalidad de salvaguardar vidas y propiedades. 

Por el deterioro de las condiciones marítimas, todos los barcos que integran la flota pesquera local y otras embarcaciones comerciales que habitualmente permanecen surtas en los dos puertos de esta ciudad, fueron trasladadas hacia la histórica bahía de Gracia, en el municipio de Luperón, para guarecer las mismas de los oleajes anormales y de las ráfagas de vientos.

A las 10:00 de la noche, el huracán María continuaba moviéndose al noroeste a 19 kilómetros por horas, con vientos máximos sostenidos de 175 kilómetros por horas (categoría 2), aproximadamente a unos 75 kilómetros al este de Cabo Engaño.