Estoy de acuerdo en que las mujeres alcancen los niveles de desarrollo que ellas necesitan para el logro de sus objetivos y la plenitud de su vida diversificada en cientos de actividades, ocupadas en trabajar, el hogar, los hijos, etc.  No obstante la mujer por su naturaleza le gusta sentirse protegida, cuidada, valorada entre otras necesidades propias.

Ahora bien, existe tanta información relacionada con lo que la sociedad le exige ser que muchas han incurrido en el error de cambiar su naturalidad y su sentido de ser mujer, tanto así que día a día es bombardeada con que ella misma se agencie todo,  que sea feliz, que sea autosuficiente, empoderada, profesional , productiva, que pese lo que una pluma, que se cree un ambiente y entorno para ella y todas hierbas aromáticas que se promueven en la redes sociales que  y al cabo no son más que teorías. Teorías que muchas veces quienes las escriben y promueven tienen un desorden en su propia vida.

Al final soy de las que cree que ser una mujer productiva no debería alejarnos de nuestra esencia. Una vida sana, no debería ser con tantas exigencias. Mujeres vivan en buscar el balance, los acuerdos, ceder, no cederse, negociar, alcance el éxito sin perder su sentido de particularidad, Sean felices con mucho o con poco, pero sin tensar la cuerda. Ámense mucho, pero también amen sinceramente a los hombres si son merecedores ellos son quienes engendran los hijos que concebimos y no son nuestros enemigos.