Lo sucedido con el anteproyecto de ley del aborto impulsado
en la cámara de diputado el 20 de julio
es lo que sucede cuando unos diputados pretenden legislar sobre las conciencias
y la moral de los ciudadanos.
Primero porque la gente no entiende lo contradictorio de
este Gobierno que por un lado se posiciona como defensor a ultranza de los
valores tradicionales de la familia mientras aplica políticas que destruyen
economías familiares en beneficio de las grandes multinacionales. Lo segundo es
que originalmente se les olvidó que si bien un amplio sector de la sociedad
dominicana se declara católico no todo el mundo admite el intervencionismo del
clero en la vida privada.
Los señores diputados no vieron lo evidente: no hablo de
separación de Iglesia y Estado, sino de conciencia personal. Los dominicanos
somos grandes demócratas y vemos admirable que una persona defienda sus valores
y opiniones morales, pero no podemos admitir que eso ofusque su sentido
político.
El Partido de la Liberación Dominicana
(PLD) gobierna para todos y cuando digo “todos” no me refiero a católicos,
cristianos, judíos, musulmanes, budista, o ateos... Por “todos” entendemos al
ciudadano como individuo político. Dios y las cuestiones religiosas son cosas
privadas de cada uno. Cualquier intento de legislar sobre la conciencia
personal de cada ciudadano no es otra cosa que integrismo.
Lo que nos queda a muchos dominicanos es la incógnita de por
qué un gran número de diputados, que antes estaban a favor del aborto
terapéutico el miércoles 20 de julio
votaron en contra.
En un país, donde el sueldo mínimo medio es de 9 mil pesos y
el mayor es de 15 mil pesos mensuales, cuando tenemos hospitales que no
funcionan y cuando funcionan es a media, donde no existe un plan de protección
a mujeres con hijos especiales, en fin…, Donde no hay protección para los
ciudadanos. No lo considero justo que una mujer teniendo un diagnostico no
favorable de su embarazo, le permitan que siga con el proceso solo por
criterios religiosos. No lo creo justo, la mujer es quien decide.