UNA VISITA AL SPA

8 de octubre del 2007

Un lugar para relajarse, embellecerse y sentirse bien


No hay mejor lugar que un spa para calmar la mente de tensiones, liberar el estrés y encontrar tratamientos de belleza.

Años atrás, estos lugares eran construidos en áreas lejanas al casco urbano, cerca de aguas termales, y eran de uso casi exclusivo de la realeza, estrellas de la farándula y el cine, reinas de belleza y personas adineradas que deseaban mantenerse bellas, esbeltas y saludables.

Pero en esta última década se ha producido una proliferación de los spas.

"Actualmente en el país hay más spas que Starbucks", dice Celeste Hilling, integrante de la junta directiva de la Asociación Internacional de Spa (ISPA) y directora ejecutiva de la compañía Skin Authority, en San Diego.

Datos recientes de ISPA muestran que en EU existen 14,615 spas, el 23% ubicado en la zona sudoeste del país. Rancho La Puerta fue el primer spa-resort que se abrió en California en el año 1940, en la ciudad de Tecate.

Según Hilling, esta proliferación de establecimientos diversificó el servicio original del spa (que en la época del Imperio Romano consistía básicamente de baños termales, masajes y algunos tratamientos de belleza) e hizo más competitivos sus precios. Asimismo, impulsó la creación de los spa urbanos que se han establecido en centros comerciales de vecindarios o zonas con alta concentración de profesionales.

Hoy en día, cualquier mujer u hombre puede darse el gusto de sentirse como reyes al usar los servicios de un spa.

Yolanda Aguilar, propietaria de Yolanda Aguilar Beauty Institute & Spa, explica que los servicios de tratamiento de cuidado de la piel, masajes, relajación, nutrición y rejuvenecimiento con técnicas no invasivas varían según el tamaño y tipo de spa.

"Hay spa tipo resorts u hotel de 50 a cien habitaciones que pueden estar ubicados frente al mar, ríos, lagos o fuentes de aguas termales, y otros con instalaciones para dar masajes al aire libre, clases de cocina y nutrición", indica esta pionera en la industria del spa en Los Ángeles.

"Ahora, los más populares son los de un día (Day Spa) y los médicos (MedSpa) que se encuentran en la ciudad y no son tan grandes".

En los spas grandes, tipo hotel, los clientes encuentran tratamientos de relajación, masajes, hidroterapia en piscinas de agua caliente o fría, jacuzzi, sauna en seco o al vapor; body wraps (envolturas corporales) de algas marinas, barro o parafina, aromaterapia y otros.

También ofrecen tratamientos de exfoliación, nutrición y revitalización de la piel, al igual que terapias holísticas, meditación, yoga, deportes, desintoxicación del sistema digestivo, clases de nutrición y cocina.

Según Aguilar, en los spas de un día se pueden obtener desde tratamientos sencillos de relajación, masaje, faciales, tratamientos de pies y manos (manicura y pedicure) hasta los sofisticados que usan cremas procesadas o naturales, máquinas para revitalizar la piel, exfoliar, activar el colágeno y los body wraps.

En esta categoría están también los que usan sólo productos naturales y los masajes manuales tradicionales.

Este tipo de establecimiento ofrece tratamientos de rejuvenecimiento no invasivos que incluyen inyecciones de botox y colágeno, rellenos de Restylane, tratamiento de mesoterapia (para bajar de peso), depilación y aclaración de la piel con rayo láser y ondas de pulsado intensivo de luz y eliminación de várices.

Existen spas combinados que ofrecen los servicios característicos del spa de día y el médico.

Martha Jiménez, de 34 años, llegó hace tres meses al spa de Aguilar en busca de un tratamiento de belleza.

"Tenía la piel de la cara muy grasosa y unas manchitas que me habían salido en el rostro, así que me hicieron un peeling y estoy muy contenta con los resultados. Mi piel está ahora suave, con un color parejo y ahora vengo para una terapia de masajes porque lo más importante para mí es cuidar la salud", dice esta mexicana residente de Los Ángeles.