¿Tocamos fondo los dominicanos en España?

Ultima Actualización: miércoles, 30 de marzo de 2016. Por: Artículo Invitado

Allí, justo en el medio de toda esa turbulencia, se sitúa el nombre de la República Dominicana, convertida en el dedo malo y débil al que hoy todo “se le pega”.

Se llevó a cabo en Madrid un importante en el que, porprimera vez en España,  una nutridarepresentación del tejido empresarial y asociativo dominicano tuvo laoportunidad de expresar abiertamente y sin tapujos todas sus inquietudes a lasautoridades representadas en las personas del embajador Aníbal De Castro, y elcónsul Rafael Acosta, quienes tuvieron que escuchar la decepción y laindignación acumuladas por años de líderes comunitarios de un colectivo que,según estimaciones oficiales, sobrepasa las 175 mil personas.

Para que esto tenga lugar fue estrictamente necesario que seprodujeran los lamentables incidentes en Tetuán y su coincidencia en el tiempo,no tan solo con pleitos entre bandas en otras zonas, sino también con lacompleja situación política que vive España, que repercute por demás, en lasrelaciones de la alcaldesa de Madrid, Manuela Carmena, con sindicatos dePolicía y medios de prensa españoles.

Allí, justo en el medio de toda esa turbulencia, se sitúa elnombre de la República Dominicana, convertida en el dedo malo y débil al quehoy todo “se le pega”. Es que siempre las sogas se han roto por su punto másfrágil. Esa fragilidad que en este caso es la resultante de años de desatencióna sus primordiales funciones diplomáticas y consulares de pasados incúmbetesque, han dejado como principal herencia el enorme reto de restaurar yfortalecer el nombre de nuestro país en España.

Pero antes de esto, nuestras instituciones gubernamentales debenabocarse a restaurarse y fortalecerse a sí mismas. Así como también reconducirsus relaciones con los demás entes sociales que componen nuestra comunidad:comerciantes, empresarios, asociaciones, medios de prensa, etc. Solo así y demanera conjunta, podremos proyectar de cara a este país de acogida, todanuestra potencialidad como colectivo ejemplar, dinámico, pujante y emprendedor,para el beneficio de nuestra diáspora, pero también de nuestro país que sebeneficia de nuestras remesas. Así como lo hemos hecho en la ciudad de NewYork.

Es altamente preocupante que el liderazgo comunitario ycomercial dominicano le enrostre a nuestras autoridades, como lo hizoprácticamente en pleno, su falta de apoyo a las iniciativas sociales, en dondeal día de hoy no existe un proyecto asociativo que reciba un mínimo apoyoeconómico sostenido para trabajar con los jóvenes, el deporte, la promoción denuestra cultura y la integración de nuestra gente en España.

También le echó en cara la falta de acompañamiento y orientación,acusándoles de insolidaridad y falta de compromiso social, desahogandosentimientos reprimidos por años.

Los ausentes a este encuentro y aun así los más mencionadosfueron nuestros chicos de las bandas, esos que dicen tener claro que solo seles busca previo a los eventos festivos, para pedirles “no hacer líos”.

El embajador Aníbal De Castro afirmó que es responsabilidadde nuestro colectivo organizarse y empoderarse. Y es cierto. Pero debe ser porigual, señor embajador, responsabilidad de nuestras autoridades aportar yacompañar al colectivo para que este se organice y se empodere. Más aun en losactuales momentos que vive España.

Así las cosas, la pelota queda en manos de nuestrasautoridades, a quienes se le debe reconocer que a pesar del relativo pocotiempo en los cargos han mostrado de sobra sus dotes de grandes seres humanos yprofesionales de gran capacidad de trabajo, celosos de cumplir con susresponsabilidades.

Que este sea el punto de partida para la creación de uncolectivo dominicano unido, vigoroso, próspero y plenamente integrado, queaporte valor a España y a la República Dominicana.

 

Fuente: www.almomento.net