PUERTO PLATA.- Gran sorpresa generó entre los turistas hospedados en los hoteles de Playa Dorada el hallazgo en horas de la tarde de ayer de un manatí muerto, en esa área justo al frente del complejo hotelero Riviera Azul.
El cadáver de esta especie en peligro de extinción corresponde a una hembra de corta edad, de aproximadamente metro y medio de largo, que según las inspecciones visuales no presenta signos de agresiones de parte de pescadores o de algún depredador natural, sin embargo llama mucho la atención la presencia de un sangrado por la vías respiratorias del malogrado animal.
Según los datos suministrados por Evelio Díaz Artiles, tan pronto se conoció de este hecho el personal de la Dirección Provincial de Medio Ambiente en Puerto Plata, se presentó al lugar para hacer el levantamiento del animal y determinar las causas por las que esta cría de manatí perdió la vida.
Para realizar las experticias de lugar, el cadáver del animal fue trasladado al laboratorio del Acuario Ocean World, en donde biólogos marinos lo examinaran para dar un informe del caso en las próximas horas.
El manatí del Caribe (Trichechus Manatus) es la única especie de sirenio en el Caribe y se caracteriza por ser un animal grande, amistoso y pacífico que vive en zonas costeras resguardadas como bahías y manglares y a veces remontan los ríos.
Los manatíes viven en aguas costeras cálidas y poco profundas, estuarios (donde los ríos se unen al mar) y en ríos de aguas lentas en algunas regiones tropicales del mundo.
La intensa cacería durante siglos ha llevado al manatí antillano al borde de la extinción ya que a pesar de restricciones en nuestros días, continúan siendo cazados furtivamente a pesar de estar protegidos por ley para aprovechar su carne y sus huesos.
De acuerdo a la tradición popular, se comenta que la carne de manatí tiene 7 sabores, mientras que los huesos del manatí son usados para realizar artesanías y también con fines curativos por la medicina tradicional.
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Las estimaciones de los biólogos marinos revelaron que quedan menos de 5 mil manatíes en todo el Caribe, América Central, costas del Sur y Este de América del Norte y Costa Norte de América del Sur y en la República Dominicana, hay una población en pleno proceso de desaparición de menos de 70 individuos.