LOS RICOS TAMBIÉN LLORAN
Por: Luis Henriquez Canela
Jueves 28 de Mayo de 2009
Este miércoles (ayer) en la tarde sucedió
en Puerto Plata lo que pocas veces ocurre aquí y en el mundo
entero; una protesta de ciudadanos de clase media y ricos.
Por lo general son gentes de temperamento
apacible ya que su condición económica les permite cubrir, con
cierta holgura, los servicios que el Estado les niega. No sufren
en carne viva los embates de la irresponsabilidad y la carencia
que soportan los más desposeídos.
Para los apagones cuentan con potentes
inversores o plantas de generación eléctrica, para su seguridad
contratan compañías de guardianes, llevan sus hijos a los
colegios privados en sus lujosas jeepetas, poseen cisternas en
sus casas, lo que les permite abastecimiento en caso de que el
líquido no fluya desde las tuberías del servicio público. Son
profesionales o comerciantes de éxito que eligieron esas
urbanizaciones hace muchos años para construir sus casas y
usarla como morada.
Las urbanizaciones Bayardo, Torre Alta y
Atlántica alojan ese tipo de ciudadanos. Ayer, como nunca había
sucedido, los habitantes de Torre Alta salieron a las calles
montados en sus vehículos para reclamar la reparación de sus
calles, la protesta parecía una procesión, si no fuera por la
estridencia con que las bocinas de esos vehículos
repiqueteaban, hubiese podido inferirse que se trataba de un
entierro. Pero el ruido de los claxon impregnaban el ambiente
como queriéndole decir a las autoridades que ellos también
tienen derecho a la protesta.
Su reclamo es justo. En más de una ocasión,
por ejemplo, la calle enlace turístico ha sido llevada al punto
de que solo hay que echarle el asfalto, pero, pasan las
elecciones cuya campaña motivó a que se hicieran esos trabajos y
todo vuelve a la normalidad. Las aguas arrastran el costoso
material y en poco tiempo la avenida vuelve a ser un camino
vecinal. Ha pasado varias veces, sino, pregúntele a los
residentes. De las demás calles ni hablar.
Después de hecha la urbanización, es decir,
sus calles asfaltadas, alcantarillado de agua potable, aguas
negras, aceras, contenes, tendido eléctrico etc., corresponde a
las autoridades recibir y aprobar. Si las autoridades permiten
que los urbanizadores no cumplan, no es un problema del
ciudadano que ingenuamente se deja llevar y compra su solar.
Ese ciudadano merecen lo mismo que merecen los de Playa Oeste,
Colinas del Sur, Padre las Casas y Villa Progreso; es el mismo
ciudadano, es el mismo voto, el mismo derecho, lo único es que
tal vez no se deje arrear hacia las urnas con la misma facilidad
conque que dirigen a los otros. Ese es el punto principal del
trato vejatorio contra el rico; el populismo.
No es verdad, como han dicho algunos
comunicadores en programas de radio y televisión, que los
residentes en Torre Alta deben ellos mismos contribuir con la
reparación de esas calles, ellos son ciudadanos que pagan
impuestos para que el ayuntamiento reciba la subvención mensual
que recibe, ellos son parte del todo. Tal vez quienes dijeron
eso podrían aprobar el que los de Torre Alta se guarden sus
impuestos, todos, para dedicarlos a cubrir de manera unilateral
sus propios servicios.
Es bueno que se sepa que esa huelga se
hizo, digo, si podría llamarse huelga a una fila de vehículos
casi todos de lujo y en su interior lino, cartier, rolex,
zapatos italianos, aire acondicionado, barriga llena,
costosísimas cirugías cosméticas, perfumes chanel, etc., después
de innúmeras diligencias, reuniones y promesas.
Todos tenemos
derecho a la protesta. Creo que es una buena oportunidad para
el Síndico y los Regidores les demuestren a esos ciudadanos que
Torre Alta no es una isla, que es
parte de Puerto Plata y merece el mismo trato que el que se le
da a los barrios marginados.
Muestra de la protesta esta jeepeta y una
joven con un cartel
que dice "solo queremos calles".
A simple vista la fila de vehículos que
conformaban la protesta.
[email protected]
Su comentario sobre esta
opinión |
Evite los insultos, palabras soeces,
vulgaridades o groseras simplificaciones |
|
|
|
|