"CASOS, RUMORES, MENSAJES Y ALGO MÁS"
POPULISMO A LO ROBIN HOOD
“Quitarle a los ricos
para darle a los pobres” El lema del personaje medieval de los
bosques de Sherwood y del condado de Nottingham, parece querer
cobrar vigencia en esta época huérfana de justicia y equidad.
Suena romántico, novelesco el dicho, como si de los ricos de
este país dependiera nuestra miseria e ignorancia.
Es interesante que
cuando se habla de las leyes y de los impuestos se nos vende
este eslogan de una forma implícita, haciéndonos creer que se
están quitando de las espaldas de los ricos grandes tesoros
económicos para distribuirlos entre las masas que no tienen
nada, cuando la realidad es que los ricos son los dueños de las
corporaciones y los que influencian en la promulgación de las
leyes que tienden a proteger sus capitales y a aumentar sus
ganancias.
Sin embargo la mayor
carga impositiva individual estremece a la clase media, a los
que han sacrificado las migajas de su pobreza para tratar de
avanzar, en base al estudio, durante largas noches sin sueño y
carretillas de frustraciones.
Estos creyentes del
futuro ven sus sueños truncados con la asfixiante marejada
contributiva porque a ellos es que el sistema ordeña con sadismo
numérico, mas son los que menos reciben (si acaso reciben algo)
de parte del gobierno. ¿Desea un ejemplo palpable? De una
vuelta por el infierno de lodo y desesperación que es la
Urbanización Cueto, con los caminos más terribles que el tramo
entre la muerte y la perdición jamás haya tenido.
¿Cuál es el pecado de
toda esta gente de clase media para semejante aberración
municipal? Ser, valga la redundancia, de clase media, pagar los
impuestos, no robarse la luz, pagar el agua y querer, por encima
de todo el tormento que les cae de arriba, vivir seriamente.
Esto es lo que se recibe
por ser serio. Mientras tanto, en barrios populosos, en los que
se hace en mucha medida todo lo contrario a los verbos en
infinitivo que dejamos atrás, en esos se están construyendo
calles, aceras, contenes y se instalan tuberías sanitarias.
No decimos que ellos no
merezcan que se les arreglen sus calles, lo justo es que se les
hagan primero a los que contribuyen con los fondos. Pero no,
porque esos pobres representan más votos ahora y hay que
utilizarlos políticamente. Populismo barato. Robinhoodismo de la
más asquerosa estirpe.
¿Qué harán las
autoridades cuando esa clase media se harte y se desespere? ¿Qué
harán cuando nos neguemos a seguir cargando como burros los
costos de los que no producen? ¿Qué harán cuando dejemos de
creer en el estado por estar éste más al servicio de las
estrategias de su partido que en el verdadero interés colectivo?
Están apostando a nuestro cansancio y desesperación. Que no nos
pese en el futuro este tratamiento injusto.
Me puse de baboso a
elogiar al síndico Walter Musa porque se iniciaban los trabajos
en la Urbanización Cueto, sin embargo hace casi un año que lo
que tenemos es el letrero de su cara sonriente en frente del mar
de lodo que compone esa barriada.
Me retracto de mis
palabras de encomio. Paso a la lista de decepcionados por el
nuevo Robin Hood que quita a los que trabajan para dárselo a los
pobrecitos de su parcela política.
caramand.blogspot.com
Su comentario sobre esta
opinión |
Evite los insultos, palabras soeces,
vulgaridades o groseras simplificaciones |
|
|