LA DELINCUENCIA:  FENÓMENO SOCIAL CREADO

Aproximadamente hace dos décadas, la delincuencia era absorbida por muestra población como un fenómeno simple de la incapacidad de nuestras autoridades para colocar más empleos en  la productividad nacional.  Desde las esferas sociales y políticas de esa época  era también auspiciada en forma de banda con direcciones políticas partidista, sino recordemos las famosa banda colorada, dirigida por personal paramilitares desde las más alta esfera del poder de la época.  

Luego, llegaron a inscribirse en el tren de la delincuencia, las banda barriales por controles territoriales dentro de sus mismo hábitat, tales fueron como los macheteros, los saca hígados, los gatos, entre muchos nombres más de mal gusto y todo por obtener control territorial de sus punto de venta de drogas.  Al decir esto, parecería que no han cambiado los tiempos, porque las cosas siguen igual a esos tiempos.   Con lo que decimos  no pretendemos quedarnos enfrascados en el tiempo, más bien queremos destacar que la incapacidad de todos nuestros gobernantes sigue sin dar un solo paso adelante para enfrentar ese fenómeno social creado. 

Sería lógico pensar que nuestra clase política nunca se ha interesado en resolver los fenómenos sociales que detectan cada vez que ostentan por atrapar el poder político, ya que  cada vez que  se alcanza el poder sólo le resta tiempo para pasarse 4 años echando la culpa  al anterior;  es una utopía pensar que antes de ganar el poder político nuestra clase partidista detectan todos los problemas sociales de la población y ofrecen resolverlos, y al llegar al poder no sólo se olvidan de esos problemas sociales, sino que los empeoran.  

La sociedad que tenemos  hoy es fruto de esa incongruencia y falta de visión de nuestra clase política, hoy estamos  huérfanos de seguridad ciudadana, tenemos miedo de salir a la calle, de mandar a nuestros hijos al colmado de la esquina, tenemos miedo de exhibir una cadena o un celular, de salir a la calle con un par de tenis buenos, porque somos victimas de un asalto a plena hora del día, tenemos miedo hasta de la policía y los militares, tenemos miedo de todo, y eso es un fenómeno social creado por la irresponsabilidad de nuestros gobernantes todos. 

Acaso no es una gran incongruencia y falta de tacto pensar en desarmar a la población presentándose casa por casa , tal como lo anuncia el flamante Jefe de Interior y Policía Dr. Franklin Almeida, luego de dar un plazo para renovar la licencia de arma de fuego, y que pasará con todas las armas ilegales, que triplican la legales?  Acaso el Dr. Almeida  no sabes que son los mismos militares que las pasan por la frontera  y las venden a los civiles?   Acaso él no sabe que cada vez que pasan 4 años de un partido los salientes y los entrante  quedan armados?    ¡Ojo, profesor Almeida! La delincuencia no se combate atando a los que queremos estar legales, es con buen sentido  y con educación nunca con represión; usted fue el primero que empezó a criticar y a hacer vida pública con el caso de los policías municipales y luego, al darse cuenta del costo político olvido el tema y todos los ayuntamientos están llenos de policías municipales.   Su gobierno insistió  mucho en un aumento para el presupuesto de Educación y luego lo dejó igual que el anterior gobierno. Así no se combate la delincuencia. 

Llevar más policías a los barrios y mejores montados puede ser una forma de represión a los que delinquen, pero es un parche que solo hace trasladar de un lugar a otro a los delincuentes, combatamos eso con educación, con salud, con mejor calidad de vida para cada uno de los ciudadanos con más empleos, con más realidad y sin tantos numeritos arreglados por el Banco Central, con menos politiquería con menos corrupción administrativa sin tanto tráfico de influencia, con menos botellas estatales para los compañeritos de base que si bien se lo merecen, harían más  con un empleo real y productivo. 

La delincuencia como fenómeno social creado por todos los colores de los partidos es responsabilidad de todos, y como tal todos son  responsables de aplicar programas serios sin represión momentánea,  impulsiva, sino con planificación  e integración de los entes participantes en ellas.   Se debe recordar que los muchachos que entran en los diferentes barrios a formar parte de esa ola de delincuencia  toman como ejemplo la delincuencia política que tenemos desde hace muchos anos en nuestro país en todo los gobiernos, y toman como ejemplo esos desvalores de “una cosa es con violín y otra con guitarra”, “los pobres no beben leche”, “ el que venga atrás que arree”, “ eso es culpa del gobierno pasado”, “borrón y cuenta nueva”, es p’lante que vamos  y llevándonos el diab…”, “entren to’  c/&%o ” entre otras muchas  frases políticas;  además de ver a muchos “funcionarios” aumentarse su sueldo exorbitantemente llegando a ganar millones mensuales, mientras los que más trabajan sólo ganan menos de 5 mil pesos. Eso es parte de la delincuencia que tenemos que combatir con educación ahora,  para que dentro de 20 años los que ostenten por el poder político tengan más conciencia delo que  nos están tocando de un par de décadas  hacia acá.  

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