MEJORAS EN LA COMPETITIVIDAD DE LAS FAMILIAS DOMINICANAS

Por: Roberto Rodríguez-Marchena

Jueves 02  de Julio de 2009

Preferible hablar de bienestar, pero como estamos sometidos a los rigores del llamado capitalismo salvaje, que se las arregla siempre para no dejarse domesticar, y nuestra vida cotidiana, al “pocos contra todos”, nada, decimos competitividad. Una barbaridad, pues los seres humanos no estamos llamados a competir por el disfrute de nuestros derechos individuales y sociales, entre ellos, el bienestar. Pero, así andamos.

Dicho esto voy al grano: dos instituciones del gobierno dominicano, la Dirección General de Impuestos Internos (DGII) y la Superintendencia de Bancos anunciaron hoy dos medidas que favorecen la “competitividad” de las familias dominicanas.

“La Dirección General de Impuestos Internos (DGII) dispuso que las empresas devuelvan cada año recursos a los asalariados que se acojan a la Ley 179-09 sobre Deducción de los Gastos Educativos en el Impuesto Sobre la Renta.

“Asimismo, la DGII dispuso que los que tributan de manera independiente recibirán la aplicación automática de los saldos a favor, por efecto de la referida ley, a los anticipos que genere su Declaración Jurada de Renta.

“Éstas y otras medidas están contenidas en la Norma General 06-09, que establece las disposiciones legales y los procedimientos que permitirán a las Personas Físicas que paguen Impuesto Sobre la Renta directamente o a través de un empleador, deducir de sus ingresos brutos los gastos realizados para cubrir la inscripción y cuotas periódicas de la educación básica.

“Esto abarca los gastos en los niveles educativos  preescolar media, técnica y universitaria (grado y postgrado) de los dependientes directos no asalariados (hijos) o propios.  No aplican para estas medidas los negocios de único dueño.

“El valor de dichos gastos no deberá exceder del 10% de la Renta Neta, menos la exención contributiva, que corresponde al ingreso gravado.”

Hasta aquí la nota de la DGII, publicada en el periódico Hoy, que aunque forma parte de los esfuerzos de la DGII por reducir la evasión fiscal y "transparentar" las nóminas, beneficia a la mayoría de los asalariados.

La Superintendencia de Bancos remitió una nota que fue publicada en la tarde de hoy por El Nuevo Diario en su edición digital titulada: “Superintendencia de Bancos hará cumplir reglamento sobre cobro de tarjetas de crédito”

“Santo Domingo.- El Superintendente de Bancos, Haivanjoe NG Cortiñas,  recordó  a las entidades financieras, emisoras y representantes de tarjetas de crédito, que en lo adelante se comenzará a hacer cumplir la Resolución No.7-2001 de la Superintendencia de Bancos, la cual pone en vigencia el instructivo para el cobro de intereses y comisiones aplicados al consumo de los tarjetahabientes de las Entidades Financieras, Empresas Emisoras y/o Representantes de Tarjetas de Crédito.

“NG Cortiñas indicó que la Resolución establece que el cobro de los intereses y comisiones por el financiamiento otorgado a sus clientes, debe hacerse sobre la base del saldo insoluto, es decir, sobre el balance promedio diario de los recursos efectivamente utilizados para financiar el consumo del tarjetahabiente de que se trate.

“El alcance de cumplimiento de esta disposición abarca a los Bancos de Servicios Múltiples, los de Desarrollo, las Asociaciones de Ahorros y Préstamos, Financieras y empresas emisoras o representantes de tarjetahabiente.

“Todas las entidades financieras, empresas emisoras y representantes de tarjetas de créditos, tienen la responsabilidad de ajustar sus programas informáticos, de forma que solo puedan cobrar intereses sobre saldo insoluto.”

La noticia debe ser motivo de alegría y constituye un acto de justicia del gobierno dominicano, aunque la decisión de la Superintendencia de Bancos pudo tener que ver con esta otra noticia que también trajo el diario Hoy hace una semana: “Crece mora en pago de tarjetas debido a contracción economía. En los últimos cinco meses el grado de morosidad en el pago de tarjetas de crédito por parte de los consumidores, aumentó a 14.8 por ciento. La información la ofreció el gerente de TransUnion, Jefrey Poyo, quien explicó que este nivel es superior al 13.5 por ciento que se registró en septiembre del año pasado. Poyo tiene la percepción de que este nivel podría continuar creciendo debido a que han decrecido las principales actividades económicas.”

Con la decisión de aplicar finalmente la resolución 7-2001, vieja de ocho años, se evita que un tarjetahabiente tenga que pagar intereses por un préstamo que no ha recibido. Porque es sencillo: si debe usted 50,000 pesos en su tarjeta y paga 49,999 pesos -muchas veces por error- no es justo, por no decir otra cosa, que le cobren intereses por los 50,000 pesos, que en verdad no ha recibido o quedado debiendo, sino por el peso que efectivamente dejó de pagar y que estaría usted tomando prestado al emisor de la tarjeta de crédito. ¡Gracias Obama!

En conclusión, y para no caer en la impertinencia, podríamos decir que las medidas confirman –¡atención altermundialistas!- que “otra competitividad es posible”, centrada en las familias, distinta de aquella, y que goza de buena prensa, enfocada únicamente en procurar mayor rentabilidad a las empresas y sus dueños.

Estas mejoras van a hacer más competitivos a los hogares dominicanos. Traerán algo de bienestar.

Publicado con autorización expresa de los autores. www.perspectivaciudadana.com