DOMÍNGUEZ BRITO Y “EL BARRILITO”
Por:
Fernando Peña
Lunes 04 de Agosto del
2008
La Oficina Senatorial que dirige
el Senador Francisco Domínguez Brito ha informado a través de los medios
de comunicación que los fondos que le entrega el Senado de la República
por medio del llamado “barrilito”, serán destinados para mejorar
escuelas públicas de la provincia de Santiago.
Claro, serán las partidas de
junio y julio, y con solo esas partidas se podrán arreglar, reparar
treinta y seis escuelas. Informó que cada escuela reparada será dotada
con equipos necesarios para la formación de los estudiantes.
Los millones que recibe el
senador Domínguez Brito por concepto del bien criticado “barrilito” él
lo destina para resolver o paliar una que otra necesidad que le
corresponde al Estado, al gobierno asumir su corrección.
Y de suerte le ayuda a construir
un liderazgo con los dineros de los impuestos que pagamos todos los
dominicanos.
Sí, construir un liderazgo,
porque ya no es posible ser senador, diputado, síndico o regidor si
usted no dispone de millones de pesos para dedicarlo al ejercicio
clientelita que hoy toma matiz de primero el “dinero” y después el
“partido”.
Y que mejor que utilizar, sin
descaro y desparpajo, los millones de las arcas del erario público para
“ayudar” a partidarios y amigos, y de paso promocionar un “liderazgo”
hecho de hojalata y saliva.
Cada vez que suelen hacer algo
hay que promocionarlo por todos los medios habidos y por haber, de paso
decir que fue “donado por el senador o diputado tal cual,”. No, señor
senador, no lo está donando usted, lo está donando la propia comunidad
que es la que paga los impuestos de donde sale ese dinero para
“ayudarle”.
Gran cantidad de nuestros
políticos usan la simulación y el engaño para amarrar a los incautos
electores.
Porque díganme si no es
simulación y engaño el usar el criticado “barrilito” para “ayudar” a
compañeros y amigos, reparar escuelas, donar becas, regalar
computadoras, tener oficina política, emplear compañeritos, y con todo
el desparpajo y cara de bueno irse a Texas, EEUU y proclamar que “es
una amenaza a la eficacia del Congreso Nacional la cantidad de tiempo
que invierte el legislador dominicano en la solución de problemas
sociales y comunitarios, cuya responsabilidad son atribuciones de otras
entidades públicas”.
¿Y por qué lo hace? Porque no
dar el ejemplo y negar esa práctica.
Es muy bueno actuar como la
gatita María ramos.
Dice el senador Brito que
“además, la labor de representación se ve amenazada por un clientelismo
grave que atenta contra las bases de la democracia”.
¿De quien es la culpa? La culpa
no la tiene el pueblo, sino ustedes, señores senadores y diputados.
El pueblo tiene que saber esas
realidades.
Porqué el senador Domínguez
Brito, como hábil operador político, no plantea el disminuir el numero
de senadores, abolir el llamado “barrilito”; sería un ahorro y con ese
ahorro se podría dar puestos de trabajos a nuestros jóvenes.
Porqué no impulsa un proyecto de
reforma que tenga temas puntales, económicos, sociales, electoral, etc.
La ciudadanía, los electores hay
que mantenerlo informada de lo que hacen y dicen los legisladores, para
presionarlos, para que cumplan sus promesas y actúen en el interés del
pueblo.
Porque los fondos que tan
alegremente se reparten a su antojo los senadores y diputados son los
dineros que a usted le sacan de su sueldo en contribuciones.
Por ello hay que estar
vigilante, hay que hacerle caso a los políticos cuando hablan o hacen,
porque sino les damos rienda suelta a hacer lo que les de la gana con
nuestros dinero.
El Autor es Periodista.
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