COMENTARIOS DE UN CAMINANTE

Por: Lic. Bodiemme S. Bordas Fonfria               

Miércoles 03 de Diciembre  de 2008

No importa de donde venimos, sino hacia donde vamos.   Lamentablemente muchas veces nos envolvemos tanto en las vanidades de este mundo material (obtener riquezas, fama, reconocimientos, títulos, etc.) que nos olvidamos de que los seres humanos están aquí para algo mas que solo eso, y esto es cada cual según su posibilidad servir al prójimo para hacer algo mejor de este lugar.

Nos creemos muy señores honorables, infalibles, buenos y justos. La historia universal nos muestra otra cosa. Por las grandes ambiciones desmedidas del hombre, odios, excesos, pasiones y demás se han cometido atrocidades, guerras, holocaustos, persecuciones, y destrucción hasta de nuestro medio ambiente.

En un planeta donde existen recursos económicos, naturales, minerales, suficientes; con una justa distribución,  no existiera el hambre ni epidemias, ni crisis económica.  Vemos que cada día estamos peores, y no se vislumbra solución en lo inmediato.

La mayoría de religiones del mundo, y especialmente la cristiana, nos enseña que si tenemos todo, y no tenemos amor, no tenemos nada. (1 Corintios 13:1   ).Quiere decir que muchas de las calamidades que padecemos nos las hemos creado con nuestras malas decisiones, egoísmos, excesos, fanatismo religioso, político o cultural, malos gobiernos, y la falta de educación fundamental.

La verdad que somos unos pecadores empedernidos, y créanme que todos tenemos nuestros pecados dentro del closet. (Yo soy uno que he cometido muchos errores en mi vida, y ruego a Dios me perdone y de la oportunidad para enmendar y corregir los mismos.)  Y no hay nadie libre de culpa. (Romanos  3:23,24)

Políticos, empresarios, religiosos, abogados,  periodistas, jueces, médicos, amas de casa, etc., todos ellos de suma importancia  en nuestra sociedad; pero  muchas veces servimos las apetencias e intereses personales y/o de nuestro grupo, y no a la colectividad de la sociedad, especialmente las clases mas necesitadas.

Fortaleciendo nuestro “yo” espiritual, se irán desapareciendo nuestros egoísmos, pasiones, contrariedades, rencores, malos hábitos, etc., en nuestro interior y cada cual hará un mejor aporte y buenas obras a nuestra sociedad conforme a la obra que Dios tenga en la vida de cada uno.  Solo con la ayuda de Dios y un auto análisis sincero podemos empezar a cambiar para mejoría. No olvidemos que los grandes cambios de la historia comenzaron con  ideales de unas pocas personas, después familias, después grupos mayores, eventualmente diversos sectores, y finalmente pueblos y naciones enteras.

El cambio comienza primero en y desde cada individuo.

En esta nueva era que comienza de liderazgo mundial que comenzara el 20 de enero del 2009 con la toma de posesión del nuevo gobierno estadounidense del Presidente Electo Barack Obama, esperemos que todos los gobiernos de los países, no importa si de la OTAN, ONU, Pacto de Varsovia, Países Alineados, los No Alineados, Centroamérica y del Caribe, trabajen para erradicar la crisis mundial económica, las guerras de Irak y Afganistán, el Conflicto Israel- Palestino, calentamiento global, la hambruna mundial y la escasez de agua que se avecinan, el renegociamiento o perdón de la deuda externa FMI con Latinoamérica y el Caribe, etc., etc., etc.

Pero mientras tanto, cada uno de nosotros podemos empezar a mejorar el mundo donde vivimos ahora mismo donde estamos, mejorándonos a nosotros mismos.

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