AHORA, EMPLEO ES PRIMERO

Por: Roberto Rodríguez-Marchena

Lunes 09 de Febrero de 2009

Crear empleos y proteger los existentes, como política pública fundamental, debería ser lo primero: permite sortear las urgencias del momento y al mismo tiempo comienza a corregir las deficiencias estructurales que han impedido por tanto tiempo el desarrollo armónico de la sociedad dominicana.

Lo dicho se explica por si mismo, pero por si acaso, aquí van algunas razones:

A diferencia de lo que ocurre con los bancos norteamericanos y europeos, los dominicanos tienen buena salud –asegura la Superintendencia de Bancos y no tengo porqué dudarlo-, no hay desconfianza entre los banqueros y ya anunciaron bajas en las tasas de interés para facilitar nuevos préstamos hacia los sectores productivos. Las regulaciones que el gobierno impuso como correctivos a las situaciones que se presentaron en Baninter, Bancrédito, Mercantil y Progreso, protegieron los ahorros de los ciudadanos y disciplinaron los manejos bancarios.

Históricamente en República Dominicana, la solución al poco poder adquisitivo y pequeñez del mercado interno dominicano pudo ser pospuesta por diferentes gobiernos amparados por el consumo de los turistas, la presencia de mano de obra extranjera, las remesas y las exportaciones, y aún así, muchas empresas nunca han podido  producir a plena capacidad.

Ahora, con la caída de la demanda en Estados Unidos y Europa, es decir, de las exportaciones, con el estancamiento en la llegada de turistas, caída de las remesas y de las construcciones, aquel problema no resuelto le da en plena cara. Ya no podrá contar con más turistas, con más exportaciones, con más remesas. Pero tampoco con masiva inversión extranjera directa, que según la EIU, pasará de 2,800 millones de dólares en 2008 a 900 millones de dólares en 2009.

¿Con qué cuenta República Dominicana? Con los que siempre debió contar: con los de aquí.

Que sirva de lección a todos los gobiernos que hemos tenido y a la élite gobernante por no haber hecho lo suficiente para evitar la existencia de tantos pobres, de tantos indigentes y de una clase media diezmada y empequeñecida por sucesivas reformas tributarias; por no haber apoyado con políticas públicas el crecimiento de la agropecuaria, de las micro, pequeñas y medianas empresas y por no haber aprovechado tantos años de crecimiento y de oportunidades para hacer los correctivos de lugar.

Proteger y crear empleos rompe el cerco de la recesión: eleva los ingresos de las familias, aumenta el consumo, estimula el crecimiento de la producción, venden los comercios y los bancos prosperan.

Danilo Medina ha propuesto un pacto gobierno, empresarios y ciudadanos para viabilizar la creación y protección de empleos. ¿Cómo lograr ese pacto? ¿De cuántos empleos estaríamos hablando? ¿Cuáles empleos podrían crearse y dónde? ¿En el área social del gobierno, en la agropecuaria, en la industria? ¿Para producir qué? ¿Cuáles empresas o actividades pueden crear más empleos en el corto plazo? ¿Cuáles apoyos necesitan esos empresarios o esos dominicanos para crear esos empleos? ¿Serán empleos de buena o mala calidad? ¿Qué es un empleo de calidad? ¿Las transferencias del Programa Solidaridad pueden convertirse en pagos por trabajos realizados? ¿Pueden las ONGs, las juntas de vecinos ayudar en ese propósito? ¿El Banco de Reservas, el Senasa podrían también contribuir? ¿Cómo? ¿Y los dominicanos en el exterior, con sus remesas, podrían ser útiles en este propósito nacional?

Dejo abierto el debate para recibir propuestas, a ver si enriquecemos y ayudamos, creando, si les parece, una minicumbre relámpago de fuerzas virtuales.

Les tengo varias para mañana.

Publicado con autorización expresa de los autores. www.perspectivaciudadana.com