CEMENTERA

PRESIDENTE CONSORCIO OZINGA BROS APOYA DECISIÓN LEONEL FERNÁNDEZ CASO CEMENTARAS

Por: Aridio Perdomo

Lunes 29 de Junio de 2009 

LUPERÓN:-El presidente del consorcio Ozinga Bros, que auspicia la instalación de la empresa Isabela Cement & Aggregates en este municipio, calificó de “atinada y sabia” la decisión del presidente Leonel Fernández para que técnicos del Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA) evalúen si procede o no la instalación de esa fábrica de cemento.

El empresario estadounidense Martin Ozinga III, quien estuvo de visita en la zona donde el Gobierno Dominicano aprobó la “Concesión Castillo” para la explotación de terrenos localizados entre los parajes Candelón y La Culebra, distantes a nueve kilómetros del casco urbano de Luperòn y a seis de La Isabela, dijo tener fe en que el proyecto seguirá marchando de manera positiva.

“Confiamos en Dios para que los resultados sean como esperamos; los técnicos del PNUMA y de la Secretaría de Medio Ambiente reconocerán que nuestro proyecto es limpio y viable, sano y progresista, y las poblaciones aledañas van a tener una gran oportunidad para el tan deseado desarrollo que necesita la región y para la mejoría de las condiciones de vida de todos los lugareños”, afirmó.

El grupo Ozinga Bross cuya sede principal de operación está en la ciudad de Orland Park, Illinois, Estados Unidos, se dedica a la comercialización de cemento, hormigones y agregados para la construcción. La inversión que contemplan hacer aquí supera los US$250 millones, de los que ya han gastado más de US$2.5 millones en estudios para refrendar la integridad de los ecosistemas, prever cualquier posible perturbación del medio ambiente que pudiera generar el proyecto y establecer las medidas minimizadoras, correctoras y compensatorias que se aplicarían.

Los empresarios norteamericanos decidieron incursionar en República Dominicana confiados en que el presidente Fernández ha venido promoviendo en diferentes escenarios internacionales el clima favorable y jurídicamente garantizado a las inversiones de capitales extranjeros, las cuales pueden contribuir positivamente a que la nación se inserte con mayores ventajas comparativas en los mercados del Caribe y de América.

REGOCIJO COMUNITARIO

Decenas de residentes en los parajes Novillero, Tasajera, Castillo, El Estrecho, La Ceibita, Barrancón, La Culebra, La Landra y La Mara se congregaron en el parque de Candelón para felicitar y agradecer al presidente Fernández por ordenar que se revisen los estudios para la instalación de la planta de Isabela Cement.

Portando cruza-calles y letreros donde afirmaban que “la esperanza ha retornado a la zona”, que necesitan fuentes de empleos, que con la cementera van a cambiar piedras estériles por divisas y que apoyan en un cien por ciento a la empresa, los munícipes mostraban regocijo y alegría.

“Nos reunimos para darle un recibimiento comunitario a la decisión del Presidente para incluir el proyecto Isabela Cement en las investigaciones que harán los técnicos del PNUMA. Estamos seguros que cuando esos técnicos vengan y analicen el proyecto se darán cuenta de que llena las condiciones que las leyes vigentes exigen para que una empresa de esa naturaleza pueda instalarse”, dijo el pastor evangélico Eddy Melo.

La empresa está concebida como autosuficiente en la generación eléctrica y de agua potable e industrial, por lo que contempla la construcción de una planta de generación y un acueducto, que servirán para satisfacer la demanda de la industria y cumplir, previo acuerdo con las generadoras estatales y privadas, requerimientos energéticos de las comunidades del entorno. También se garantizará a los comunitarios la construcción y servicios de centros de adiestramiento y capacitación, estación de bomberos, primeros auxilios y defensa civil.

Como sus productos finales estarán orientados fundamentalmente al mercado de los Estados Unidos, el proyecto también incluye la construcción de un muelle para garantizar el fluir controlado del producto, minimizando igualmente los impactos ambientales que la movilización de equipos pesados pudiera producir en el entorno.

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