Editorial

   

FUSIÓN ASOCIACIÓN NORTEÑA CON LA NACIONAL

26 de noviembre de 2008

Desde el punto de vista económico, la noticia más trascendente para la comunidad puertoplateña durante muchos meses, ha sido la finalización de las negociaciones de adquisición por parte de la Asociación La Nacional de Ahorros y Préstamos de su homóloga Norteña. 

Desde hace tiempo, el tema ha sido el obligado en ciertos círculos.  Las asociaciones de ahorros y préstamos son instituciones financieras privadas de carácter mutualista, sin fines de lucro, creadas mediante la Ley No. 5897 del 14 de mayo de 1962, con el objetivo de promover la captación de ahorros para el financiamiento de la compra, construcción y mejoramiento de la vivienda. 

Debido a que  los gobiernos pusieron a estas entidades a pagar impuestos,  se vieron precisadas a convertirse en banco comerciales.  Son mutualistas, lo de “sin fines de lucro” es de discutir.   

Una negociación de ese tipo no puede permanecer ajena a la sociedad dada sus amplias connotaciones, es por eso que algunos han dicho que para arrojar resultados positivos a la comunidad, la entidad absorbente, La Nacional, deberá enfocarse principalmente en el desarrollo de proyectos habitacionales dirigidos a la clase media.   Viviendas y apartamentos de tres millones de pesos o menos. Saben, de seguro, que es grande el déficit habitacional en la zona. 

La Nacional, para que trascienda y su adquisición sea fructífera, deberá democratizar el crédito, es decir, darle acceso a préstamos a  cierto segmento poblacional que había sido marginado, debido, dicen algunos,  a la estructura organizacional volcada hacia dentro  y  a los recios criterios de evaluación imperantes a la hora de calificar un prospecto prestatario.   

Es bienvenida La Nacional a Puerto Plata;  para el fomento de la pequeña y mediana empresa, para la construcción de viviendas y apartamentos a precios bajos, para los préstamos a largo plazo a bajas tasas, en fin, es bienvenida para generar la dinámica necesaria que haga fácil la obtención del préstamo al encargado de departamento de un hotel, al maestro de escuela, al abogado, al médico, al dueño de colmado, de farmacia, tienda etc., para que cada uno pueda mejorar, comprar o fabricar su vivienda o apartamento.    

Bienvenidos pues, distinguidos banqueros de la Asociacion  La Nacional de Ahorros y Préstamos, han de saber que hay muchas esperanzas cifradas en la democratización del crédito por esta zona.

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