Editorial

 

FALSIFICACIÓN DE FACTURAS PARA COMBUSTIBLE

 11 de Septiembre de 2008 

Hay un déficit, un descuadre con saldo negativo en las cuentas del Ayuntamiento Municipal de Puerto Plata, pero no hay sometimiento alguno.  Las facturas falsificadas para compra de combustible existen, pero no la acción tendente al castigo de los culpables.  

Las investigaciones no son tal. Bien se sabe quien o quienes están involucrados en este mini desfalco que de hecho, es la primera mancha negra en la gestión del Sindico Walter Musa.  

La sindicatura está obligada a rendir cuentas a la población.  Los culpables de este robo deben ser sometidos a un proceso judicial profundo cuya conclusión sea extirpar de raíz cada una de las frutas podridas responsables de esa “indelicadeza”.  

Se rumora que hay un funcionario de esta entidad que ha erigido una lujosa vivienda de la noche a la mañana. Si es así, el Síndico debe cuestionar el origen de esos fondos hasta dar con la fuente.  

La nobleza probada del Sindico en su accionar no debe perjudicar a las mayorías. La drasticidad debe imperar en este caso. Sería un triste error por parte del Ejecutivo Municipal dejar las cosas como están.  

La población está cansada de que se utilicen los recursos municipales, tanto en especie como en dinero, para provecho propio. 

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