Editorial

    

ALTO PRECIO DE LA DEMOCRACIA

 20 de mayo de 2008

En materia electoral, sería bueno que la junta explore la posibilidad de reducir al mínimo el número de partidos. Urge someter al congreso un proyecto de ley modificando las reglas de juego. De esa forma habrá más gente trabajando y menos politiqueando.  

De igual modo, se debe ponderar la reducción de la gran cantidad de municipios y distritos municipales que no son más que huacales de botellas.  Vividores de la política esperando un cheque mensual sin hacer nada.

Los distritos municipales deberían ser dirigidos por un encargado con asiento en el ayuntamiento del municipio al que pertenezca el distrito. De esa forma se evita toda esa burocracia insustancial y todos esos sueldos. Así los recursos alcanzarían mejor.   

Otra es, el número de senadores y diputados por votante, son demasiados gastos para un país pobre.  

Alto precio el que se paga por esta democracia injusta.  

 

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