Ecología
 

¿QUÉ ES UN ENJAMBRE DE ABEJAS?

Martes 21 de Julio de 2009

La enjambrazón, la migración de un sinnúmero de abejas con su reina para formar otra colmena, se produce cuando las princesas están ya prontas a nacer; en aquellos momentos se evidencia un apogeo en la colmena, una superabundancia, una superpoblación, una prosperidad que desemboca en la migración de una parte de la colmena junto a su antigua reina.

La reina se va y deja su lugar a una de sus hijas-princesas que deberán luchar por el trono. Cuando vemos un enjambre volando o posado en alguna parte, se trata de una migración de abejas junto a su reina, que se han marchado a fundar una nueva colmena.

Antes de la enjambrazón, las obreras que van a partir agitan sus alas (cosa anormal dentro de la colmena, puesto que no aletean en condiciones normales, salvo las ventiladoras) y elevan muchísimo la temperatura a tal punto que a veces la miel se derrite. “La reina, que nunca se aparta de los panales del centro, recorre jadeante y desatenta la superficie de la multitud vehemente”.

Durante la enjambrazón, de 60 a 70 mil abejas de las 80 o 90 mil dejan la colmena, en pleno apogeo de la abundancia. Si la colmena es pobre, ha sido saqueada o ha producido poco, no la dejan y no hay enjambrazón ni princesas.

Únicamente durante la enjambrazón es permitida la estadía de los zánganos dentro de la colmena, donde serán elegidos uno o varios amantes reales. Antaño se creía que la enjambrazón era una especie de locura fatal que sobrevenía a las abejas; también creía la gente, antes de estudios más minuciosos de las colmenas, que había un rey de las abejas, no sospechaban que era una reina.

“Pero no es una emigración ciega, sino un sacrificio que parece razonado de la generación presente a la generación futura. Basta que el apicultor agrande el panal y destruya a las princesas todavía inertes para que la agitación se calme y la reina renuncie a ver el sol otro año más”. Cuando la enjambrazón es abortada, la reina reanuda su tarea materna que consiste en poner, siguiendo una espiral, de celda en celda, sin omitir ni detenerse, dos o tres mil huevos cada día.

 

Su comentario sobre esta opinión
Evite los insultos, palabras soeces, vulgaridades o groseras simplificaciones
Nombre:
Apellido:
Email:
País:
Ciudad:
Mensaje:

 

     

 

Más Opiniones